Prueba

Pónganse a pensar en su manera de vivir, y vean si de verdad siguen confiando en Cristo. Hagan la prueba, y si la pasan, es porque él vive en ustedes. Pero si no confían en Cristo de verdad, es porque él no está en ustedes. 2 Corintios 13:5 TLAI

Pongámonos a pensar un momento en nuestra forma de vivir. Solemos utilizar el final de un año para meditar sobre lo ocurrido y sobre lo que pretendemos para el tiempo venidero. ¿Pero nos ponemos a pensar en cómo son nuestros días actuales? ¿Cómo nos comportamos en la rutina?

Necesitamos explorarnos. Y probarnos, probar nuestra fe. De qué manera nuestra confianza en Dios nos hace manejarnos en nuestra vida. De qué manera nuestras acciones y reacciones se condicen con lo que profesamos. Muchas veces viene el problema económico, la enfermedad, las peleas y lo que resalta de nuestra vida no son signos de confianza en Dios y su poder. Más bien la queja, el malhumor y las malas decisiones brotan de un ser que no demuestra que Jesús vivan en él.

Por eso debemos preguntarnos en todo tiempo: ¿nuestra vida comprueba que seguimos confiando en Dios? ¿confiamos en Dios en algunas cosas y en otras no? ¿quienes me rodean pueden ver que Jesús está conmigo?

Hagan la prueba, y si la pasan, es porque él vive en ustedes.